Estaba claro que se necesitaba una renovación de plantel. Estaba claro que se necesitaban refuerzos. Y estaba claro que no había que repetir errores. Nos dijeron, que había que reducir el plantel, que había muchos contratos y pocos jugadores valederos para la primera de San Lorenzo. Bueno, a día de hoy, se incorporaron 17 (!) jugadores y pareciera que se busca alguno más. De esa cantidad, a priori, menos de la mitad parecerían útiles para la institución. Y, aunque muchos del plantel anterior abandonaron el club, seguimos en la misma. Un plantel abundante, para un solo torneo. Más negociados que refuerzos. Y por supuesto, las salidas, casi todas, de dudoso provecho para el club. En algunos casos, ciclos cumplidos, en otros, en teoría, servían para bajar el presupuesto, en el caso de las cesiones, de los juveniles, para que tengan experiencia … la realidad indica, que una vez mas, sufrimos viendo a intentos de futbolistas, faltándole el respeto a la camiseta, negociados de pocos, sumando deudas para el club, y sobre todo, desperdiciando jugadores de inferiores, inferiores que deberían ser formativas de jugadores y fuentes de ingresos. Hay casos esperanzadores, Jara, Stracqualursi, Aguiar, pero también, uno se pregunta, para que se trae a jugadores, de inferior calidad y dudosisima valía para tapar jugadores de inferiores. Para que aumentar el pasivo? En que suman al plantel?
En el medio, el mundo San Lorenzo, se debate entre 2 modelos de club antagónicos, entre los que eligen otra propuesta futbolística diferente a la que propone el técnico y los que bancan.
Lo importante, como siempre, serán los resultados, que, harán que en un club, que vive en permanente turbulencia, se pueda trabajar bajo una tensa calma y se logren la mayor cantidad de puntos posible, para estabilizarse nuevamente, en el plano futbolístico. Lo institucional, es otra historia …
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